MOOC: MEJORA DE LA CONVIVENCIA Y PREVENCIÓN DEL ACOSOS ESCOLAR

MÓDULO 2: PAUTAS DE INTERVENCIÓN EN EL ACOSO ESCOLAR

CASO 1, SITUACIÓN DE VICTIMIZACIÓN DE TIPO PASIVO: retraimiento, timidez, falta de habilidades sociales…

ANÁLISIS DEL GRUPO

En primer lugar contextualizaremos el grupo clase, se trata de un grupo de 64 alumnos con un 58% de chicas y de una media de edad de 14 años. La mayoría del alumnado se siente bien en la clase y tiene muchos amigos por lo que parece un ambiente adecuado para el estudio, con bastante tranquilidad y orden para dar la clase aunque se podría mejorar. Además algunos alumnos encuestados admiten haber conflictos entre alumnos de clase.

Se localizan 5 alumnos amables que ayudan a los demás, los cuales en caso de acoso podrían actuar como alumnos ayudantes, estos alumnos son: alumno 51, 21, 1, 41 y 13. En el test también aparecen 4 alumnos con riesgo de bullyng que son alumno 26, 34, 53 y 16.

ANÁLISIS DEL ALUMNO 26

Estudiaremos en concreto en caso del alumno 26. De los 64 alumnos del grupo 21 alumnos confirman que este alumno tiene riesgo de bullyng se realiza un heteroinforme y un autoinforme y al compararlos se extrae la siguiente información:

El alumno no sufre agresiones físicas de manera reiterada aunque en el autoinforme el aulumno confiesa que alguna vez ha sido agredido físicamente.

El alumno no es insultado o intimidado con frecuencia pero sí que alguna vez ha sufrido este tipo de agresión.

Según la percepción del propio alumno no es rechazado pero los testigos corroboran que en la mayoría de las ocasiones el alumno es rechazado y aislado.

El contraste de ambos informes rebela que el alumno no es acosado por redes sociales o el móvil.

El alumno 26 tiene algún amigo en clase, esta situación la lleva un poco mal, no sabe defenderse según sus compañeros aunque él no se siente indefenso, no discute ni le gusta llamar la atención, es tranquilo y bastante tímido, pero no parece presentar diferencias notables con el resto.

Como conclusión se puede extraer que el alumno 26 es una víctima de acoso pasivo, dado que del sociograma se extrae que el 32% del alumnado no lo quieren como compañero se suma el aislamiento social que padece además de alguna agresión aislada que haya podido sufrir. El alumno confiesa su situación de aislamiento aunque se muestra un poco más positivo ante su rol en clase que el percibido por sus compañeros, no obstante el alumno es consciente de que no es integrado en el grupo y comenta su situación en casa con normalidad.

INTERVENCIÓN

Por tratarse de una situación de acoso confirmada por los datos extraídos de los test realizados por el programa socioescuela, la situación requiere intervención. En primer lugar definiremos el tipo de victima ante la que nos encontramos, su carácter introvertido, aislado, débil, sin recursos para defenderse define a la víctima como una víctima pasiva.  Así que, se debe modificar la situación de la víctima a nivel social. Para ello,  el mejor tipo de intervención es la ayuda entre iguales. Para llevar a cabo el protocolo de ayuda entre iguales seguiremos los siguientes pasos:

Detección: el tutor debe mantener una entrevista con la víctima con tal de conocer el caso en profundidad y mostrarle su apoyo y deseo de ayudarle.

Selección de alumnos ayudantes: deberemos buscar dos o más alumnos ayudantes que colaboren en mejorar la situación social de la víctima, estos alumnos deberán tener dos perfiles diferentes alumnos con una fuerza social en el grupo, que podría ser cualquiera de los alumnos que hemos definido al inicio como que ayudan a los demás (51, 21, 1, 41 y 13) y alumnos amigos de la víctima (Antonio o Manuel) que le fortalezcan y dificulten el acoso.

El siguiente paso sería seguir un programa de mejora de las habilidades sociales específicas para el acoso y aspectos emocionales de mejora de autoestima. Saber enfrentarse a sus compañeros con educación cuando se están metiendo con él, trabajar sobre las relaciones sociales como fortalecerlas y mejorarlas. Además, para personas con un perfil tímido, introvertido es fundamental mejorar el autoconcepto y la autoestima para ellos podemos recurrir a un sinfín de actividades con tal de trabajar la concepción que tienen de uno mismo para tener más seguridad y confianza en sí mismo.

Además intentaremos sitiar a la víctima en un sitio de clase donde se sienta acogida rodeada de los alumnos ayudantes evitaremos la sobreprotección de la víctima de una forma publica en clase porque esto favorecerá el debilitamiento de la víctima frente a la fortaleza de los acosadores.

En lo que respecta a los posibles acosadores en el caso de ser localizados se trabajarían con ellos aspectos emocionales, creación de habilidades alternativas a la agresión y modificar el liderazgo positivo en negativo.

Además con todo el grupo clase realizaremos talleres donde se trabaje la empatía, la diversidad del aula que el alumnado entienda que cada persona tiene su personalidad y eso es exactamente lo que nos hace especiales del resto y sobre todo trabajar la inteligencia emocional. Actividades que trabaje este tipo de inteligencia son muy efectivas dado que se trabaja por un lado la inteligencia interpersional la habilidad para relacionarse con los demás y por otro lado la inteligencia intrapersonal que es la habilidad para relacionarse con uno mismo. Si realizamos actividades conjuntas en todo el grupo clase se favorece la cohesión grupal trabajando al mismo tiempo con víctimas que refuerzan su personalidad y acosadores que aprender a ponerse en el lugar del otro y a relacionarse con los demás de una manera sana.

Es muy importante durante todo el proceso de intervención tener una comunicación fluida con las familias de las partes afectadas para poner en su conocimiento tanto la situación que se está viviendo así como las medidas que se van a tomar y que las familias compartan sus impresiones sobre sus respectivos hijos.

SEGUIMIENTO DE LA INTERVENCIÓN

En primer lugar se pondrá la situación en conocimiento del claustro de profesores que tiene relación con ese grupo con tal de que ellos observen en la marcha diaria de la clase si observan cambios y cuál es la situación que se va dando diariamente.

Es necesario mantener la comunicación con las familias e intercambiar opiniones de lo que ellos ven fuera del centro educativo y si los cambios son positivos o no.

Se realizaran tutorías tanto grupales como personalizadas de manera conjunta el tutor y el gabinete de orientación con tal de evaluar los progresos de la intervención y la mejoría de la situación de la víctima.

Es muy importante que de todas las actuaciones que se realicen desde la detección hasta el seguimiento quede constancia escrita.